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UNION NACIONAL DE TRABAJADORES |
M A N I F I E S T O
A todos los trabajadores mexicanos,
Al pueblo de México,
A los partidos políticos,
A las autoridades del Trabajo,
A los empleadores,
La Unión Nacional de Trabajadores (UNT), constituida por más de doscientos sindicatos que representan a más de un millón y medio de trabajadores ubicados en sectores económicos e instituciones sociales y culturales de vital importancia, manifiesta su posición ante el anuncio del titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Lic. José Antonio González Fernández, en el sentido que deben iniciarse los trabajos tendientes a reformar legislación laboral que actualmente nos rige:
- Inmediatamente después del anuncio de una pronta reforma a la Ley Federal del Trabajo, la UNT declaró públicamente que dicha pretensión no sería efectiva sin la activa participación de los trabajadores, en primer lugar y, por supuesto, de los empresarios, los partidos políticos y otros grupos sociales representativos. Propusimos mecanismos transparentes, abiertos, democráticos y participativos como premisas básicas para crear las condiciones que permitan construir el debate nacional y los consensos entre las fuerzas productivas, sociales y políticas, debate en el que se abordará la problemática del desarrollo nacional, ya que sostenemos que la mera reforma a la Ley Federal del Trabajo no resuelve los problemas económicos, políticos y sociales que venimos afrontado desde hace cuando menos dos décadas y que se han traducido en pérdida del nivel adquisitivo, injusta distribución del ingreso, creciente concentración de la riqueza, carencia de recursos fiscales para ampliar el alcance de los servicios básicos, vulnerabilidad financiera, privilegio de la especulación en detrimento de la producción y estrechamiento del mercado interno, entre otros.
- Hemos rechazado también el punto de vista que la reforma laboral sea un asunto exclusivamente político y legislativo entre el gobierno y los partidos, sujeta a negociaciones menores de carácter coyuntural, cuando se trata de uno de los aspectos centrales de la vida económica y social de la Nación. En consecuencia, proponemos que la reforma a la legislación laboral tenga como marco de discusión al propio modelo de desarrollo del país, en la medida en que se pretende su transformación no sólo legal sino laboral y productiva, económica y social. La reforma deberá ser para la prosperidad de la Nación y no para favorecer la explotación de los trabajadores.
- Por ello, la UNT reconoce las reiteradas declaraciones del Secretario del Trabajo en el sentido de que el Ejecutivo NO enviará al Congreso de la Unión propuesta alguna de reformas a la citada Ley que no sea el resultado de un proceso de construcción de consensos entre los sectores productivos directamente involucrados y del conjunto de las fuerzas políticas del país.
Entendemos que estas declaraciones son producto de las condiciones políticas actuales que nos obligan a todos a buscar acuerdos y compromisos por la vía democrática, para así consolidar las nuevas formas de convivencia política y social que los mexicanos estamos construyendo. Entendemos también que este comportamiento de respeto y mesura sólo se mantendrá si, como hasta ahora, el conjunto del sindicalismo nacional unifica sus fuerzas para defender lo que a todos incumbe, es decir, los intereses históricos e inmediatos de los trabajadores y del pueblo mexicano.
- Desde su nacimiento, la UNT ha venido reclamando la necesidad de abrir los terrenos de la discusión de los grandes problemas nacionales a los sectores más directamente afectados. Por ejemplo, a una semana de su nacimiento, la UNT se encontraba ya en la Cámara de Diputados demandando que la discusión acerca de la asignación de recursos presupuestales considerara las necesidades de los trabajadores mexicanos en ámbitos tales como la educación pública, la salud, la seguridad social, la vivienda y el ingreso.
- Entre los argumentos más utilizados para demandar las reformas a la LFT se encuentra la necesidad de flexibilizar el mercado laboral, a fin de garantizar un permanente crecimiento de la productividad del trabajo, facilitar el ingreso de capitales extranjeros, elevar la competitividad de la economía nacional y modernizar al aparato productivo. Sin embargo, un somero análisis del entorno laboral nos demuestra que México es uno de los países con más alto nivel de flexibilidad laboral por lo que hace a ingresos, jornadas, condiciones de seguridad e higiene y , en general, el conjunto de las condiciones de trabajo, por no mencionar las condiciones de vida, propias de una nación sumamente pobre. Dicho en otras palabras, el trabajador mexicano, en términos generales, es uno de los trabajadores menos protegidos por el Estado y por las instituciones sociales, por lo que su fuerza de trabajo además de flexible es sumamente barata.
La modernización que México necesita no es la del abaratamiento mayor de su fuerza de trabajo sino la del mejoramiento de la calidad de vida de todos sus habitantes.
- Por otro lado, podemos afirmar que la legislación laboral existente se viola todos los días y que en la realidad prevalecen prácticas discrecionales e instituciones frágiles que sólo encubren mecanismos de explotación salvaje y abaratamiento primitivo de los costos laborales. Posiblemente, algunos sectores buscan reformar la Ley para adecuarla a estas realidades y no tener que seguir pagando el costo de la simulación de los derechos laborales y el soborno a las autoridades correspondientes. Por lo demás, en los últimos años, muchos de estos aspectos flexibilizadores que hoy se demandan se han ido imponiendo en las revisiones contractuales, empresa por empresa.
- Por estas razones, la posición de la UNT ha sido la de luchar por una REFORMA LABORAL Y PRODUCTIVA que forme parte de una REFORMA SOCIAL, ECONOMICA Y DEMOCRATICA DEL ESTADO MEXICANO.
- Una reforma laboral y productiva es aquella que tiene por objeto la actualización y adecuación del conjunto de las instituciones, leyes y prácticas económicas, políticas, sociales y culturales del mundo del trabajo, con el fin de que, efectivamente:
- Nuestro aparato productivo pueda enfrentar exitosamente los retos de la globalización económica, la revolución tecnológica, la competencia por los mercados y la integración de grandes bloques comerciales.
- Como la reforma laboral no se puede limitar sólo a fortalecer la competitividad del sector moderno de la economía, la reforma pendiente deberá ayudarnos a promover el trabajo en la ciudad y el campo, a desarrollar al conjunto del territorio nacional, a resolver el doloroso problema de la pobreza extrema, a superar la enorme desigualdad entre clases y sectores sociales, pueblos indios y regiones y a impartir justicia social para todos los mexicanos. En otras palabras, deberá ser el fundamento de una auténtica transición democrática que no se limite a la conquista de los derechos político-electorales, sino que se amplíe el ámbito del mejoramiento económico, social y cultural del pueblo mexicano.
- Finalmente, esta reforma deberá garantizar la plena vigencia y realización de las conquistas y derechos históricos de los trabajadores y del pueblo mexicano consagrados en la Constitución y en buena parte de la actual Ley Federal del Trabajo.
- El mantenimiento de la estructura autoritaria y cupular del Estado Mexicano, junto con la aplicación de un modelo de vocación claramente neoliberal, durante las dos últimas décadas, han provocado la profundización de los problemas tradicionales del país, la creciente polarización social que hoy amenaza convertirse en descomposición política y las crisis recurrentes de cada fin de sexenio, entre otros.
Urge por ello un cambio de rumbo y un nuevo modelo de desarrollo justo, equilibrado, democrático, social y sustentable.
- En consecuencia, proponemos que en lugar de una negociación menor de misceláneas laborales, fiscales y financieras construyamos las bases para este cambio de rumbo y de modelo de desarrollo a través de un ACUERDO NACIONAL PARA LA REACTIVACION PRODUCTIVA, LA REFORMA SOCIAL Y ECONOMICA Y LA GOBERNABILIDAD DEMOCRATICA, que emane del debate entre los sectores productivos y las fuerzas políticas y cuyo objetivo sea el diseño de las políticas públicas necesarias para revalorizar el trabajo, reforzar las capacidades competitivas de las empresas, ampliar la cobertura del gasto social y fortalecer las condiciones para el crecimiento económico y la gobernabilidad democrática, que nos permitan evitar la catástrofe de una nueva crisis, ahora económica, social y política.
- Consideramos que esta reforma integral de nuestro entorno sólo es posible con una activa participación social, ya que se requiere de un amplio diagnóstico productivo, rama por rama, sector por sector, región por región. Los sindicatos somos pieza clave, porque representamos un sector organizado, directamente involucrado en la producción y los servicios, y que conoce de las necesidades esenciales de gran parte de la población. Por ello hemos hecho un llamado a todas las organizaciones sindicales existentes en nuestro país, a fin de que analicemos conjuntamente las propuestas que se han hecho, señalemos avances y retrocesos y elaboremos una posición conjunta que sea discutida, completada y ratificada ampliamente por nuestras bases, sirviendo como sustento para discutir con los empresarios, los partidos políticos, con otras fuerzas sociales y con el Gobierno un nuevo pacto social, que concluya en el citado ACUERDO.
- Este ACUERDO deberá contemplar, entre otras, medidas que:
- afirmen la igualdad de los trabajadores ante la Ley, derogando el Apartado "B" del Artículo 123 Constitucional.,
- garanticen el pleno ejercicio de la libertad de organización, de sindicalización y de contratación colectiva, la autonomía frente al Estado, las iglesias, los partidos políticos y los patrones y la más amplia democracia interna, a fin de que se eliminen todas las formas de simulación sindical, los contratos de protección, las tomas de nota y demás formas que limitan o impiden una sana vida sindical,
- establezcan la bilateralidad representativa en todas las negociaciones,
- fijen un salario remunerador y distributivo,
- defiendan el derecho al trabajo, a la seguridad social, a la educación pública, a la vivienda, a una jubilación digna,
- establezcan el reparto de los beneficios obtenidos de una productividad con sentido social,
- instituyan la igualdad laboral bajo una perspectiva de género,
- protejan la estabilidad en el empleo, las condiciones de salud en el trabajo y una permanente capacitación que garanticen una mejora continua en las condiciones laborales y vitales de la clase trabajadora mexicana,
- garanticen autonomía y eficacia en la impartición de la justicia laboral.
Por nuestra parte, continuaremos buscando las más amplias alianzas y la unidad de acción con el conjunto del sindicalismo nacional, con el fin de mantener una sola voz de los trabajadores, tanto para defender nuestras conquistas históricas como para hacer valer nuestra participación en el debate nacional.
Proponemos a los empresarios discutir los contenidos principales de un posible acuerdo para la reforma laboral y productiva del país, a fin de que pueda servir de base para las negociaciones nacionales, sean del ACUERDO que proponemos o de la reforma que tenga lugar, según sea el caso.
Buscaremos aproximar posiciones con los partidos políticos, primero para crear las condiciones democráticas de la reforma y, después, para impulsar las posiciones más favorables para la revalorización del trabajo y el desarrollo del país.
Al pueblo de México le proponemos sumarse a las acciones que hemos emprendido para detener todo intento de reforma autoritaria, para defender los derechos históricos de los trabajadores y para abrir el paso a la lucha por un cambio democrático de rumbo y un nuevo modelo de desarrollo nacional.
C O N V O C A M O S
- A todas las organizaciones sindicales, a los trabajadores, a las organizaciones sociales, a los académicos, a los estudiosos de la realidad nacional, a los abogados laborales y al pueblo de México a un Foro Sindical de Análisis sobre la Reforma Social, Económica y Democrática del Estado Mexicano que se celebrará el viernes 21 de agosto de 1998 en el Centro de Convenciones del SNTSS, Calzada de Tlalpan #1721, a media cuadra del Metro General Anaya, a partir de las 9:00.
- A todas las organizaciones sindicales, a los trabajadores y al conjunto de organizaciones sociales identificadas con los intereses de los trabajadores al MITIN que realizaremos el jueves 3 de septiembre, a partir de las 17:00 ante la Cámara de Diputados, con motivo de la apertura del periodo ordinario de sesiones.
BASTA YA DE CARGAR SOBRE LA ESPALDA DE LOS TRABAJADORES Y DEL PUEBLO DE MEXICO EL COSTO DE LOS ERRORES ECONOMICOS Y POLITICOS DEL GOBIERNO.
YA ES HORA DE LA REFORMA SOCIAL Y DEMOCRATICA DEL ESTADO MEXICANO, PARA GARANTIZAR LA PROSPERIDAD DE LA NACION.
A T E N T A M E N T E
"POR LA UNIÓN DEMOCRATICA DE LOS TRABAJADORES"
México, D.F., a 6 de Agosto de 1998